Odin se llama el canario de mi suegra, en honor a un viaje inolvidable que hizo junto al Sr. José Luis a los países nórdicos. A ella le encantan los canarios, por lo que, entre todos sus hijos nos pusimos de acuerdo para regalarle uno.
Mi esposo y yo nos encargarmos de buscarlo, pero no fue una búsqueda larga, ya que cuando vimos al pichón de canario (hacía pocos días que estaba en la tienda) metido en un cajón de metacrilato de 2x2, no tardamos mucho en decidirnos. También es verdad que, a pesar de las limitaciones, el pequeñín se veía muy vivaz.
- "Tiene una manchita negra en una de sus alitas" -le acoté a mi esposo como recordatorio de nuestro encargo de buscar un "canario amarillo".
- "¿Y qué? -me contestó- "No vaya a ser que nadie escoja al pajarito porque tiene una mancha".
Y así fue. Odín resultó ser un canario muy juguetón y muy buen cantante.
Dicen que los canarios sólo cantan en las mañanas, pero definitvamente éste no tiene horario.
Mi esposo y yo nos encargarmos de buscarlo, pero no fue una búsqueda larga, ya que cuando vimos al pichón de canario (hacía pocos días que estaba en la tienda) metido en un cajón de metacrilato de 2x2, no tardamos mucho en decidirnos. También es verdad que, a pesar de las limitaciones, el pequeñín se veía muy vivaz.
- "Tiene una manchita negra en una de sus alitas" -le acoté a mi esposo como recordatorio de nuestro encargo de buscar un "canario amarillo".
- "¿Y qué? -me contestó- "No vaya a ser que nadie escoja al pajarito porque tiene una mancha".
Y así fue. Odín resultó ser un canario muy juguetón y muy buen cantante.
Dicen que los canarios sólo cantan en las mañanas, pero definitvamente éste no tiene horario.
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